martes, 22 de noviembre de 2016

La palabra en las alturas del halcón









“Me gustaría que Venezuela fuera más que una canción”

Héctor Gustavo Alvarado

Por: Pablo J. Fierro C.

Lo que entiendo de Héctor es una autenticidad digna de respetar; un encuentro eventual en la sencillez de las aceras, ateneos, vías virtuales y sobre todo en poesía escrita, que a mis ojos resalta en el contexto de las voces valencianas, sin el debido auge que fuera de cualquier abordaje ontológico ordinario, debería rodear su poética. PF  

DD: Poeta, ¿qué significa para usted la palabra "Fiesta"?
Más allá de una reunión entre seres queridos, Serrat con ironía en su canción, genera mucha creatividad. El arte es una fiesta muy personal entre el espíritu creador y el artista: la fiesta de las palabras... por ejemplo.
DD: ¿Cómo se la lleva hoy con esa fiesta artística en la que usted es protagonista activo a partir básicamente de la poesía?
Más vivo que nunca... y con la actitud de un halcón, el enfoque de un arcoíris y el valor agregado al oír un tango como destino final... a eso le llamo “propósito” –Otorga importancia a esta palabra, acentuándola.
DD: Cuando mencionó a Serrat hice un breve recorrido por la letra y me recreé en la frase "Hoy el pobre y el villano bailan y se dan la mano sin importarles la facha", la asocié un poco, antes de que me hablara de tango, con el "Cambalache" aquel de Discépolo ¿Va por ahí su referencia al término ironía?
Correcto hermano; tiene que ver con un estado de conciencia, desde hace más de medio siglo tengo recuerdo de ese trovador... y ambas letras son memorables y más vigentes por todas las calamidades que vivimos… Claro... hay muchas islas por navegar en las aguas de la imaginacion.
DD: ¿Cómo te gustaría que estuvieran las cosas en Venezuela sobre todo de aquí a unos años, en cuanto a las relaciones humanas?
Con el corazón y un rosario en mis manos Pablo, recién cumplí cuatro décadas de conocer y vivir en Europa... y mi frustración como citadino e intelectual, es que esto no ha cambiado; pero me gustaría que Venezuela fuera más que una canción... y fuera el relámpago que construyó su casa en la tierra.
DD: Bueno, ya analizaremos con calma esa poderosa expresión final, por el momento, observando tu actual desempeño radial, y dentro de la idea de una Venezuela "canción", ¿piensas que el reggaetón pueda ser una metáfora de los tiempos que nos ha tocado vivir?
   No cuestiono el hecho fortuito del género, sino el mal gusto musical de los directores y programadores con mucho poder, y que hayamos vivido para contar esta pobre historia del comercio musical.
DD: ¿Qué anuncia un el relámpago?
Identidad, una senda, un estado lumínico humano.
DD: Siempre recuerdo una entrevista a Cabrujas en la que afirmaba que la identidad del venezolano era no tener identidad ¿es para conjurar esa sentencia que añoras ese resplandor en la vecindad?
Yo quedé absorto impactado cuando leí y releí “El día que me quieras” de Cabrujas, luego la vi en dos puestas en escena por dos directores y aún no salgo del genio cabrujeano, la mía culpa de no saber quienes somos; pero sin tapujos... claro que sabemos lo que somos: una cosmogonía nada estática; soy y seré un nómada... esa es la ruta, sin restarle opción o mérito a un rostro nacional. Fíjate que pienso que Luis Aparicio desde su experiencia deportiva, puede darnos con la humildad del caso, una clase magistral.
DD: Sin dudas, Luis Aparicio es un ejemplo sempiterno. La dificultad del intelectual, como el dramaturgo en cuestión, es que va un poco más allá, al batear, de la onomatopeya del contacto entre bate y pelota -el "toc"-; sin subestimar la vida pública y ejemplar de Aparicio, un intelectual, y especialmente Cabrujas, es más sonoro, más palabra; y para ir cerrando poeta, me gustaría alguna reflexión personal en general y la mención de dos nombres en poesía que le resulten destacables; un hombre y una mujer.
En España vi a unos chicos discutir en torno a una obra de Cabrujas, “Acto Cultural” Creo... -yo más que todo me refiero es al concepto de excelencia mediante la disciplina-. Muy bien: “El camino no elegido” del poeta Robert Lee Frost, poesía de Kabir y Tagore. Toda la obra de Cesar Vallejo y de Octavio Paz. Tiemblo cuando estudio a Santa Teresa de Jesús “Moradas del castillo interior” y el “Cántico espiritual” de San Juan de la Cruz. Hay un texto que me impactó y motivo una fuga a Colombia “Los elementos del desastre” de Álvaro Mutis. Y para concluir me gusta mi libro “El animal metafórico”. Muy agradecido.
DD: Gracias, Héctor.
Celebro el esfuerzo de un trabajo profesional que tú conoces y te entusiasma.

FUENTE / DiarioDigital
https://sites.google.com/site/diariodecir/pdf

3 comentarios:

  1. Gracias, estimado Carlos, por publicar la entrevista. Pablo Fierro.

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  2. Felicitaciónes tanto para el entrevistado, Poeta Héctor Gustavo como para el entrevistador Sr. Pablo Fierro. Excelente trabajo.

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